Diccionario

Acrónimo de American Association of State Highways and Transit Officials. Asociación de Empleados Estatales de Tránsito y Carreteras.  

En geotecnia, el término «ábaco» se refiere a una estructura o dispositivo utilizado para medir la deformación y asentamiento de un terreno o una estructura. Consiste en una placa de acero o concreto que se coloca sobre el suelo o la estructura y se utiliza para medir los cambios en la elevación o deformación a lo largo del tiempo. El ábaco se compone de una serie de puntos de referencia, generalmente marcados con varillas o sensores, que permiten medir con precisión los movimientos o cambios en la posición del terreno. Estos movimientos pueden ser causados por cargas aplicadas a la estructura, cambios en la humedad del suelo, asentamiento diferencial u otros factores. La información recopilada a través del ábaco es fundamental en la geotecnia, ya que permite evaluar la estabilidad y el comportamiento de una estructura o terreno en función de los movimientos y cambios que experimenta. Además, esta información es utilizada para diseñar y tomar decisiones relacionadas con la construcción de fundaciones, muros de contención, etc.

En geotecnia, un «abanico» se refiere a un depósito de sedimentos aluviales formado por la acumulación de materiales transportados por un río o corriente de agua en su desembocadura en una llanura o valle. Estos sedimentos, como gravas, arenas y limos, se depositan en forma de un abanico o cono aluvial, con mayor acumulación en la parte central y menor hacia los bordes. Los abanicos son característicos de zonas montañosas, donde las corrientes de agua traen consigo materiales arrastrados desde las montañas hasta la llanura aluvial. La formación de un abanico está influenciada por varios factores, como el caudal y velocidad del agua, la pendiente del terreno, la erosión y el clima. En ingeniería geotécnica, los abanicos representan un desafío en la construcción de infraestructuras debido a su naturaleza no consolidada y heterogénea.

Depósito formado por una corriente de agua en la zona donde dicha corriente pasa de un valle estrecho a una llanura o a un valle amplio, y cuya forma semeja a un abanico abierto, o a un segmento circular. Los suelos de los depósitos aluviales están formados típicamente por una mezcla desordenada de arenas, gravas, cantos y bloques de roca.

Depósito formado por la acumulación de sedimentos transportados por el agua de escorrentía, en un área horizontal o de muy baja pendiente, en donde termina una vaguada. Su forma en planta semeja un abanico abierto o un segmento circular. Los suelos de los abanicos coluviales están formados típicamente por arenas mal gradadas y gravas mal gradadas.