Estratificación
La estratificación, en términos geotécnicos, se refiere a la disposición de los materiales del suelo o las rocas en capas o estratos distintos y bien diferenciados. Estos estratos pueden variar en cuanto a su composición, densidad, textura, resistencia, permeabilidad u otras propiedades geotécnicas. La estratificación puede ser el resultado de diversos procesos geológicos, como sedimentación, deposición de materiales por la acción del agua o el viento, actividad volcánica, metamorfismo, entre otros. Estos procesos pueden dar lugar a la formación de estratos horizontales, inclinados o verticales, dependiendo de los movimientos tectónicos o la actividad geológica que hayan ocurrido en la zona. La estratificación es un factor importante a considerar en la ingeniería geotécnica, ya que influye en la estabilidad y comportamiento de las obras de ingeniería, como cimientos, excavaciones, taludes, túneles, entre otros. La presencia de estratos con diferentes propiedades puede afectar la resistencia, la deformación, la permeabilidad y la durabilidad.